Durante los tres meses que he compartido con Hannah, mi compañera americana, he disfrutado muchísimo y sobretodo he aprendido y adquirido nuevos valores y perspectivas respecto a ciertos aspectos de mi vida y “mi mundo” al compararlos con los de ella y su familia. He visitado otros estados, he ido a un campamento de verano, he hecho amigos nuevos e incluso he ido a un instituto americano. Cuando ella estuvo aquí fuimos a Barcelona, a Madrid y a la playa y no sabría decir dónde disfrutamos más. En definitiva, ha sido un verano maravilloso y he encontrado gente que espero no olvidar nunca.